jueves, 30 de abril de 2009

Caricatura: "In a Parallel Existence..."

En esta caricatura, el autor se burla de la famosa frase de Lennon, pero esta vez apelando a una existencia paralela en donde otro John Lennon realiza una declaración controversial: Los Beatles son más populares que... el pastel de dulce de café.

If Not For You (Bob Dylan, 1970)


Esta canción es una composición de Bob Dylan que aparece en su álbum de 1970 "New Morning", así mismo, aparece en las recopilaciones "Biograph" y "Bob Dylan Greatest Hits Vol. II". La cercanía de Dylan con Harrison se encuentra muy bien documentada, inclusive Harrison pasó una temporada en Woodstock cuando Dylan grababa las sesiones clandestinas con The Band editadas después como "The Basement Tapes". Así mismo los Beatles presenciaron la presentación de Dylan en la isla de Wight en 1968 y Dylan acompañado por Harrison interpretaron la canción que presentamos en este post durante el soundcheck del Concierto Para Bangladesh. Esta versión que les ofrecemos aquí pertenece al demo de la canción interpretado por Dylan, después Harrison realizaría una hermosa versión para el extraordinario All Things Must Pass.


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The Midnight Special (The Beatles, 1969)



La pretensión de la música honesta del Let It Be era presentar un album lo más cercanamente posible a una presentación en directo sin mezclas, ediciones ni doblajes, además de llevar a la banda directamente hacia sus raíces presentando números clásicos y composiciones nuevas que dieran a conocer al mundo la fuerza original del cuarteto. Una de esas canciones clásicos junto con Blue Suede Shoes y otros clásicos del rock and roll, es The Midnight Special, conocida en el mundo por la interpretación que de ella hace el Credence Clearwater Revival, la interpretación de los Beatles aunque no tan buena como aquella, no desmerece demasiado a pesar de tratarse de un simple ensayo.


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Mean Mr. Mustard (The Beatles, 1969)



Esta canción fue concebida por Lennon en Rishikesh en la primavera de 1968. Cuando se grabó el demo, en las sesiones de Esher, en mayo de ese mismo año la canción incluía un largo estribillo que no se utilizó en la grabación definitiva de Abbey Road, e iba enlazada a otra pequeña canción llamada Shirley (seguramente por Shirley Evans, la acordeonista de Magical Mystery Tour). Afortunadamente Charles Manson no supo esto en su momento, ya que lo habría interpretado como un mensaje más para sus famosos asesinatos.


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Eddie Your Dog (The Beatles, 1969 ca)


Extraída de las sesiones acústicas para lo que primero llamaron el album Get Back y acabaría siendo el disco Let It Be, presentamos esta canción a mitad del camino entre canciones como Blackbird y Mother Nature´s Son, del periodo Beatles y canciones solistas como Teddy Boy. La canción presenta únicamente a Paul con su guitarra acústica sin nadie más para acompañarle, situación que sin duda le llevaróia a plantearle la inminencia de la disolución del grupo.


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lunes, 27 de abril de 2009

Caricatura: "You passed the audition"

La caricatura ha sido un género marcado por un lado, por las posibilidades que ofrece en tanto medio de expresión que permite una serie de excesos imposibles de ser presentados en otro medio de expresión, como la crítica o la denuncia; por otra parte, representa un género menor, un engendro de las artes plásticas, un medio de expresión poco serio y sin ninguna clase de respeto. Aquí ni pensamos una cosa o ninguna otra. Lo tomamos como otra forma de comunicación que nos permite manifestar nuestra admiración por el cuarteto.

En esta viñeta podemos apreciar a un pletórico John Lennon recibiendo en el cielo a George Harrison, después de la muerte de éste último, mientras le dice: "Veo que has pasado la audición". Frase que manifiesta el deseo de todo beatlémano de ver realizado el sueño imposible de la reunión del cuarteto aunque sea en el cielo.

El Mito: La Reunión del Cuarteto. La Grabación Secreta de 1976.



En el año 2003 la página de subastas por internet Moments in Time nos sorprendió al anunciar una cinta de una supuesta reunión de los Beatles para una sesión de grabación en unos estudios de Los Angeles. Esta es la historia completa.

El 2 de noviembre de 1976, los Beatles se reunieron para una sesión de grabación en Davlen Studios en Los Angeles y grabaron cinco canciones, ambos hechos desconocidos hasta ahora. Paul McCartney había sugerido esta historia por años -en 1997 un reportero en el Reino Unido había amenazado con estar "ocupado en la corte por el resto de tu vida" al haberlo hecho público. El periódico The Sun, dadas las leyes aracanas que gobiernan a la prensa en el Reino Unido, se desdijo y no lo publicó. La sesión supuestamente finalizó en una gran disarmonía con los Beatles peleando entre ellos y finalmente se enfuecieron. Los nombres de las canciones como se enlistasn en el oficio de los estudios Davlen son. 1. Happy Feeling, 2. Back Home, 3. Rocking Once Again, 4. People of the Third world, 5. Little Girl.

Supuestamente, también estuvo presente George Martin, también Len Kovner, copropietario y fundador de Davlen Studios, y que supuestamente puede confirmar todo lo anterior, como pueden hacerlo, así mismo los ingenieros que estuvieron presentes. La cinta fue supuestamente en su mayoria borrada ante la insistencia de los Beatles, para intentar mantener en secreto el hacho de que esta sesión tuvo lugar. se presume que una versión no borrada existe en una bóveda en los estudios Abbey Road.

Después de esta extraordinaria noticia el señor David Lines, co-fundador y copropietario de los Estudios Davlen, declaró que la información proporcionada por Leonard Kovner en cuanto a la reunión secreta de los Beatles y la cinta de audio de tales sesiones pueden haber sido, en su opinión, incorrectas.

"La cinta en cuestion ofrecida a la venta por la página Moments in Time es consistente con aquellas que usamos en los años 70's. Nunca, los ingenieros o los operadores de grabación dieron etiquetas en blanco para practicar escribiendo títulos de canciones o cualquier otra información. Yo personalmente nunca vi las iniciales usadas en lugar de los nombres completos de los productores tampoco de los ingenieros, lo cual me lleva a creer que algún personal implicado en la sesión puedo haber la sesión pueden haber llenado la etiqueta en contraposición a como lo haría alguien de nuestro equipo. creo que si algún joven ingeniero había llenado la hoja de la lista de canciones, el o ella habrían sido efectivamente instruídos para usar los nombres de la gente implicada como una forma de formalidad y respecto."




"En este punto en el tiempo, no tengo información para desaprobar que una sesión secreta pudo haber tenido lugar en Davlen. De nuevo, la cinta en cuestión es idéntica a aquellas que usábamos en Davlen, y aún tengo varias en mi posesión. Mi compañero fundador Leonard Kovner, aparentemente mandó un mail al investigador escocés Roy Deane en 1997 admitiendo que la sesión había tenido lugar. Aunque Leonard y yo tenemos nuestras diferencias, creo que el está diciendo la verdad al seños Deane con respecto a este evento histórico".

Len Kovner afirma, por su parte que, "ninguna sesión de este tipo tuvo lugar en los estudios Davlen... La caja de la cinta ofrecida en venta, no dice los Beatles en ella o dentro, en ningún lado. La caja fue lo más probablemente rescatadas de un depósito de basura en o cerca de los Estudios en Los Angeles, probablemente a principios de los años 80's." Kovner dice que aunque todos los miembros de la banda habían grabado en el estudio en varios momentos durante los setenta y ochenta, ninguna sesión reunió a los cuatro." Hasta aquí la historia, tan fascinante como muchas de las historias que circulan alrededor del cuarteto, en especial en el tema de la esperada reunión. La biografía de los Beatles es tan compleja y termina de forma tan abrupta que para todo seguidor queda latente el deseo de ver aunque sea por una sola vez al cuarteto reunido, en especial para quienes, como muchos de nosotros sólo sabemos de ellos a través de las fuentes secundarias.

domingo, 26 de abril de 2009

The Fab-tastic Four

Esta animación, que al parecer es una introducción a otra llamada A Hard Day's Fight, nos presenta a unos Beatles mezclados con los Fantastic Four (Los Cuatro Fantásticos), en donde en lugar de Ringo aparece Thingo, mezcla de Thing (La Mole, aquí en México) y Ringo, George es el hombre invisible en alusión al supuesto segundo plano de Harrison, John es Human Torch (Antorcha Humana) porque grita "Shine On" en alusión a Instant Karma!, y Paul es Mr. Fab-tastic. Buena animación pero se queda en nada.



Whatever Gets You Thru' The Night (John Lennon, 1974)

Presentamos un clip de la canción Whatever Gets You Thru' The Night en donde se muestra a John como un sus buenos tiempos con los Beatles, haciendo como que hace trucos de magia, caminando con estilo o haciéndole simplemente al tonto. Documento interesante que nos pone a pensar qué tipo de canciones habría escrito si no se hubiera retirado después del nacimiento de Sean.



Bob Meets The Beatles (S/F)

Una animación más del cuarteto en donde se parodia el momento en que Bob Dylan conoce a los Beatles y las consecuencias que se derivan de ello. Después de una sesión de obligadas risas, John dice que es una morsa y se coloca un par de lápices para ejemplificarlo, Ringo ve como pasan a su alrededor las figuras de animación de la película Yellow Submarine, mientras George anda en lo suyo comiendo en el suelo. La animación fue realizada por Meth Minute 39.


sábado, 25 de abril de 2009

Dear Prudence (The Beatles, 1968)


Después de su regreso de la India, los Beatles tienen suficiente material para grabar el siguiente álbum, por lo cual deciden reunirse en la casa de George para grabar los demos. De esas sesiones demónicas, rescatamos la versión de Dear Prudence, casi exacta a la versión final, lo cual nos ejemplifica la aversión de por aquél entonces de John hacia los adornos excesivos y las sesiones maratónicas para grabar una canción, concepto que llevaría a todo el grupo a la idea de la música honesta y las terribles sesiones de Let It Be que, en conjunción con los otros problemas del grupo, acabaría siendo el golpe definitivo a la carrera del cuarteto.


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Golden Slumbers/Carry That Weight (The Beatles, 1969)


Esta toma de las canciones Golden Slumbers y Carry That Weight, concebidas al unísono, nos presentan a un Paul McCartney desgañitándose por alcanzar el registro exacto de la melodía; ambas canciones utilizan los mismos acordes (La menor 7, Re menor, Sol 7, Do), por lo cual la transición es apenas perceptible. La toma que presentamos en esta ocasión nos muestra a las canciones sin la mezcla del album y sin encimarse en el medley con Polythene Pan, de Lennon. Las canciones fueron grabadas primero del 2 a 4 de julio (sesiones de donde proviene esta grabación) y el 30 y 31 de julio de aquel año. La mezcla final se realizó el 15 de agosto, en esta última sí participó Lennon, ausente desde el 6 de julio por un accidente de auto en Escocia y que es el mismo accidente en donde Yoko perdería a su primer hijo con John, momento inmortalizado en el álbum en conjunto Life With The Lions, cuando Lennon graba con un estetoscopio los últimos latidos de su hijo nonato.


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Los 60's: La Década de los Beatles. Parte 3.

Parte 3: Gran Bretaña, un país en cambio (1965-1966)



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jueves, 23 de abril de 2009

Three Legs (Paul McCartney, 1971)


En 1971 Paul McCartney estaba decidido a mostrarle al mundo que sobre él debería recaer la tradición Beatle y que su carrera solista representaba una continuidad con la historia del cuarteto. Para ello hace uso de toda su creatividad y su experiencia para regalarnos uno de los mejores albumes solistas de cualquier ex Beatle: el disco Ram, privilegio que solo comparte con discos como All Things Must Pass, Imagine o Clode Nine. Extraído de los demos para este album les presentamos la versión rupestre de Three Legs, más blusera que el original, con la voz más apagada que en la versión definitiva y que nos permite apreciar las ideas en gestación del genio musical de McCartney.


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Cotton Fields (Paul McCartney, 1972)


En el año de 1972 Paul McCartney empezó una breve gira por algunas universidades de Inglaterra para ir calentando motores para una gira británica y europea en pequeños teatros y estadios. Paul no se había presentado en vivo desde el 66 por lo que para él era necesario recordar el timing de un concierto y las sensaciones que estos producen. se escogieron universidades porque en ellas más que la expectativa por ver a Paul en compañía de la primera encarnación de los Wings, reinaba la incredulidad para cerciorarse de que quien se presentaba en un escenario tan sui generis era en realidad el ex-Beatle. la canción que presentamos en esta ocasión, Cotton Fields, es conocida por la magistral interpretación que de ella hace el Credence Clearwater Revival, pero la versión de Paul no se queda atrás, lo cual nos demuestra que al ex Beatle le hacía falta pisar de nuevo los escenarios después de una ausencia tan larga.


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domingo, 19 de abril de 2009

Paul McCartney at Coachella 2009: Something

Paul McCartney se presentó ayer en el festival de Coachella, para dedicar una velada nostálgica dedicada a sus compañeros fallecidos: Linda Eastman, John Lennon y George Harrison, a quienes dedica My Love, Here Today y Something, respectivamente. Si había dudas sobre la capacidad de Paul para entusiasmar a un público como el de este festival, dedicado a sonidos alternativos contemporáneos, se disipan al observar estas imágenes tomadas con una cámara casera pero que no por ello dejan de ser importantes, agradecemos a las personas que se toman la molestia de subir estas escenas a la red tan valiosas para aquellos que no podemos estar ahí en directo. Desde luego se encuentran en blanco y negro para poder captar las imágenes nocturnas pero esta circunstancia le da un toque nostálgico a las imágenes.


Los 60's: La Década de los Beatles. Parte 2.

Parte 2: Sexo, Espías y Rock and Roll (1962-1964)



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Animación Flash: Glass Onion



Otra animación Flash, más sencilla pero no menos interesante.


The Beatles - Glass Onion

Animación Flash: Maxwell's Silver Hammer

Animación de la canción Maxwell's Silver Hammer, que ejemplifica la historia de la letra, pero no incluye imágenes del cuarteto. Esta animación nos permite darnos cuenta de que tan infantiles y tiernas pueden ser las canciones de Paul, quien se encargó de su gestación. En serio, no es apta para menores de edad. disfrútenla.


Maxwells Silver Hammer
Maxwells Silver Hammer

Animación Flash: Tomorrow Never Knows

La tercera animación que circula en la red es la de Tomorrow Never Knows.

The Beatles - Tomorrow Never Knows



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Animación Flash: Come Together


Otra animación flash, esta vez se trata de la canción Come Together, aunque menos sensacional que la de I Feel Fine, no puede dejar de faltar en estas páginas.


The Beatles - Come Together

sábado, 18 de abril de 2009

Improvisación: McCartney y Donovan (1968)


La relación de Paul McCartney con Donovan se remonta ala viaje realizado por el cuarteto a la India, en donde Donovan se hizo amigo de George y de Paul principalmente. En ese lugar Donovan le enseñó a Paul y a John diversos métodos de finger picking para guitarra, que los dos compositores de The Beatles usarían en algunas canciones de su White Album (como Blackbird, Mother Nature's Son o las lennonianas Dear Prudence y Julia), y que antes de ese momento no se puede apreciar en ninguna canción del grupo. En las canciones que les presentamos en este post, McCartney y Donovan se encuentran ensayando para el album de Nicky Hopkin "Post Card", en donde Paul actuó de productor. Como se sabe McCartney le abrió las puertas en el mundo musical a Hopkin al firmarle para el sello Apple en 1968 y ser el productor de su primer álbum. Seguramente en una pausa de la grabación se unen Paul y Donovan para improvisar algunas canciones como How Do You Do, Blackbird y Heather de McCartney, y "Mr. Wind" de Donovan.


jueves, 16 de abril de 2009

Paul & Ringo Live at Radio City Music Hall (04/04/09)

Un concierto sobre meditación en el que participaron diversas estrellas musicales reunió a Paul McCartney y Ringo Starr por primera vez en siete años.

La reunión de los sobrevivientes de los Beatles fue el plato fuerte del concierto “El cambio empieza por dentro” el sábado por la noche. El espectáculo se llevó a cabo en el Radio City Music Hall a beneficio de la Fundación David Lynch, que busca enseñar técnicas de meditación a los jóvenes.

Beatles

“Señoras y señores, Billy Shears”, dijo McCartney al público, refiriéndose al personaje ficticio del disco clásico de los Beatles “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”, al tiempo que Starr salía al escenario e inmediatamente interpretaba “With a Little Help from My Friends”, otro clásico del famoso cuarteto de Liverpool.

La última vez que McCartney y Starr tocaron juntos fue en el 2002, en el Concierto para George en memoria del ex Beatle George Harrison, efectuado en el Royal Albert Hall, en Londres, un año después de la muerte de éste.

El concierto del sábado, en el que también participaron otros cantantes como Sheryl Crow, Eddie Vedder y Donovan, duró unas cuatro horas. Sin embargo, a pesar de la duración, miles de asistentes se pusieron de pie cuando McCartney salió al estrado casi al final.

El músico comenzó con una versión enérgica de “Drive My Car” para seguir con melodías de los Beatles y de su grupo Wings, desde “Can’t Buy Me Love” y “Let It Be” hasta “Jet” y “Band on the Run”.

McCartney recordó a John Lennon al tocar “Here Today”, tema que escribió para el ex Beatle asesinado en 1980.

Para la parte final, el músico británico estuvo acompañado de Donovan, Crow, Mike Love (de los Beach Boys), Vedder, Paul Horn y Starr en la batería. Después de una versión épica de “Cosmically Conscious” siguieron con “I Saw Her Standing There”.

Entre las canciones las estrellas hablaron del poder de la meditación para superar problemas. Howard Stern, famoso personaje de la radio y la televisión, dijo que ha meditado durante 37 años y que le atribuye a esta práctica el hecho de que su madre haya salido de la depresión.

Otros momentos destacados fueron la versión energética que Vedder y Ben Harper tocaron de “Under Pressure”, de Queen; mientras que Crow rindió homenaje a Harrison con una versión armoniosa de “My Sweet Lord”, del ex Beatle.

Historia: La demanda que destruyó a los Beatles

Nota preliminar: El siguiente artículo fue publicado originalmente en la revista Beatlefan en su edición de julio de 2002 por Joseph Self. Tere Chacón obtuvo el permiso para publicar el texto en español en el blog de su propiedad (Vease blog). Beatleología agradece a ambos por la difusión de la historia de los Beatles y remite al lector hacia ambos sitios.



Antecedentes


Mucho se ha escrito a través de los años en relación a las circunstancias que causaron que Paul McCartney demandara a sus compañeros de grupo en el último día de diciembre de 1970. Su acción inició una serie de batallas legales entre The Beatles y varias compañías asociadas a ellos que continuaron durante la mayor parte de las siguientes dos décadas. Este artículo únicamente se enfoca en la acción inicial promovida por McCartney y examina precisamente lo que él pidió al tribunal inglés que llevó su caso. Al enfocarse en los factores citados que hicieron que McCartney buscara apoyo legal del sistema inglés, este artículo no hablará de los argumentos presentados por las partes en disputa o de la orden de la corte que estableció que la solución solicitada (el nombramiento de un receptor y un contador imparcial) fuera concedida. Excepto por los antecedentes descritos al principio y las observaciones del autor en las conclusiones, este escrito se basa únicamente en los argumentos efectuados por el representante de McCartney en la corte los días 1 y 2 de marzo de 1971.

Para entender por qué McCartney ejerció una acción tan drástica como lo fue el demandar a sus amigos y ventilar públicamente los asuntos de The Beatles, se presenta a continuación un resumen de los antecedentes.

Antes de abril de 1967, George Harrison, John Lennon, Paul McCartney y Richard Starkey, también conocido como Ringo Starr, fueron socios a voluntad. Como Pete Best podría confirmarlo, esto significa que el acuerdo de trabajar juntos podría darse por terminado por cualquiera de ellos y en cualquier momento. Sin embargo, el 19 de abril de 1970, los integrantes del grupo firmaron un acuerdo de asociación por un periodo de 10 años, con el nombre "The Beatles & Co.". Apple Corps Limited también formó parte de la asociación con un ochenta por ciento de interés sobre el capital y utilidades de la asociación. Apple aceptó pagar la suma de £800,000 para ser considerado como socio. Como las corporaciones son tratadas como entidades legales diferentes, The Beatles estaban asociados a su propia compañía. El acuerdo de asociación le dio a la compañía el derecho de manejar los asuntos de la asociación y explotar los activos de ésta de la manera mas efectiva para la obtención de utilidades como fuera posible. El acuerdo además establecía que "los libros de contabilidad serían llevados por la asociación" y que el último día de cada año, cada socio recibiría una hoja de balance anual y una declaración de pérdidas y ganancias del año.

The Beatles contemplaron que su manager de casi toda la vida, Brian Epstein, estaría a cargo de sus asuntos en la implementación y ejecución de este nuevo acuerdo. Sin embargo, en agosto de 1967, Epstein murió y los asuntos financieros de The Beatles se volvieron más complejos. Apple se convirtió en una compañía totalmente operativa y experimentó pérdidas a una velocidad alarmante. A principios de 1969, John Lennon le comentó a Ray Coleman, de la revista Disc, que si las cosas continuaban como habían estado en sus asuntos financieros, The Beatles estarían en bancarrota en seis meses.

Esta declaración llamó la atención de Allen Klein, un norteamericano que se desempeñaba en el negocio de la música y en el manejo de artistas en Nueva York y que también era agente en la presentación de ciertos grupos británicos, entre ellos, las presentaciones de los Rolling Stones. Klein, que controlaba una compañía estadounidense llamada ABKCO, se congració con Lennon, Harrison y Starr a finales de invierno y principios de la primavera de 1969. McCartney, sin embargo, no vio con entusiasmo la participación de Klein, en parte porque él quería que su cuñado, John Eastman, fuera el manager de The Beatles. A pesar de la falta de unanimidad dentro del grupo, se firmó un contrato el 8 de mayo de 1969 entre ABKCO y Apple, ejecutado por Lennon y Harrison como directores de Apple, así como por los tres Beatles que querían a Klein a cargo de sus asuntos. McCartney nunca firmó el contrato con Klein.

En el curso del siguiente año y medio, Klein se desempeñó con cierto éxito como el manager de The Beatles. Renegoció el acuerdo existente de las grabaciones con Capitol Records para los Estados Unidos, Canadá y México y aumentó las regalías de diecisiete y medio por ciento a veinticinco por ciento. También participó en las negociaciones para liberar a The Beatles de Nems, la compañía formada por el fallecido Epstein. También puso la película "Let It Be" en manos de los distribuidores y el álbum del mismo nombre en las tiendas. Por otro lado, The Beatles perdieron el control de sus derechos de publicación en Northern Songs, ya que la compañía fue vendida a ATV (una falla que, para ser justos, no puede achacársele completamente a Klein). Alejó a McCartney aún más al intentar retrasar el lanzamiento de su álbum solista "McCartney" y al permitir el ingreso al mercado de Let It Be después de que Phil Spector trabajó en él.

En 1970 fue claro que The Beatles no iban a volver a grabar juntos, por lo menos en el futuro inmediato. Starr estaba trabajando en su proyecto individual, que incluía Sentimental Journey y Beaucoups of Blues, y continuaba su carrera fílmica. Tanto Lennon como Harrison se encontraban grabando sus álbumes solistas producidos por Phil Spector. McCartney no se encontraba muy dispuesto a hacer nada después del lanzamiento del disco "McCartney", por lo menos en parte ya que no estaba claro si las ganancias de las grabaciones solistas se tendrían que dividir como lo establecían los términos del acuerdo de asociación.

Aunque McCartney le recriminó a Coleman la publicación de las declaraciones de Lennon, él también compartía esa preocupación sobre los asuntos financieros de The Beatles. McCartney había nombrado a algunos contadores para trabajar para él en mayo de 1969 y para el 10 de diciembre de 1970, los contadores de The Beatles Company no habían podido producir un reporte de ningún periodo subsecuente al 31 de marzo de 1968. Una de las labores que Apple asignaba a The Beatles en forma individual era que se encargaran de su contabilidad, y el estado de sus registros financieros hizo que McCartney cuestionara si existía suficiente dinero en las cuentas de Apple para pagar los impuestos que se debían. No fue sino hasta que se programó para diciembre de 1970 una apelación por parte de The Beatles en contra de una declaración del impuesto sobre percepciones, que McCartney y sus asesores encontraron necesario iniciar una demanda.

McCartney demanda a Lennon, Harrison, Starr y Apple

En su acción promovida en la Alta Corte de Justicia, División de la Cancillería, en Londres, McCartney tuvo que nombrar como demandados a sus socios. Aunque los demandados eran John, George y Ringo, era claro que el blanco principal de su demanda era Allen Klein. McCartney solicitó dos sentencias básicas. Primero, solicitó el nombramiento de un receptor que actuara como el custodio de las propiedades y los intereses en los cuales The Beatles estaban involucrados. Segundo, pidió que la contabilidad de la condición financiera de The Beatles fuera llevada por alguien contratado por el receptor. De acuerdo al diccionario legal Black's Law Dictionary, un receptor es "una persona indiferente a las partes de una causa, nombrado por la corte para recibir y preservar las propiedades o fondos durante un litigio, recibir sus rentas, manejar sus asuntos y utilidades y aplicar o desecharlas en base a lo indicado por la corte cuando no parezca razonable que cualquiera de las partes mantenga su propiedad".

El objetivo era contar con alguien que no fuera personal de Apple (que estaba trabajando bajo la supervisión de ABKCO) para manejar los asuntos de Apple y mantener los registros financieros en orden. Fue claro que la posición de McCartney era que The Beatles no eran ya un grupo en funcionamiento y que el receptor tuviera la labor primaria de recolectar los pagos de diferentes fuentes relacionados con el trabajo de The Beatles desde sus inicios.

Debido a que Paul fue la parte iniciadora, debió presentar la "carga de pruebas" que justificaran la necesidad de tal acción extrema. Después de todo, le estaba solicitando al juez que interviniera en los contratos comerciales que habían sido firmado voluntariamente por todos los involucrados y que despojara del control de la compañía a la mayoría de las partes firmantes del contrato, es decir a John, George y Ringo. Paul, aparentemente, inició la acción legal a insistencia de sus asesores, pero cuando ingresaron a la corte, declararon cada queja que tenían sin titubeos.

El abogado de McCartney, David Hirst, habló durante el periodo de la presentación del resumen y presentó el caso en contra de los tres Beatles, Apple y, por extensión, Allen Klein, de una manera ordenada y detallada. Hirst proclamó que sin un receptor de confianza, los activos de The Beatles se encontraban en riesgo. McCartney presentó, en siete puntos, las pruebas por las cuales se podía inferir que los activos de la sociedad habían sido mal usados o contabilizados. Estos puntos fueron: (1) que Allen Klein facturaba más dinero para su comisión que aquella a la que tenía derecho con base en el acuerdo que la mayoría de The Beatles habían firmado con él; (2) los demandados habían firmado contratos que afectaban la propiedad de la sociedad sin el conocimiento o consentimiento de McCartney; (3) el estado abismal de la contabilidad de la sociedad; (4) agrupado con los siguientes dos puntos, la situación financiera de la sociedad; (5) la situación de los impuestos que generaba la sociedad; y (6) los adelantos excesivos tomados por los socios sobre los activos de la sociedad. Finalmente, el séptimo punto fue un alegato general que establecía que Allen Klein había actuado de manera inapropiada como el manager de The Beatles, y basado en su comportamiento, la corte debía asumir que era muy probable que continuará así en su capacidad como manager de The Beatles.

También fue de la incumbencia de McCartney demostrar que al analizar el caso en su totalidad, la corte dictaría como apropiada la disolución de la asociación. Además de los puntos establecidos anteriormente, Paul declaró que su libertad artística estaba siendo coartada por sus socios al grado de que era un "trato injusto" entre los mismos.



Alegatos de Pagos Excesivos por parte de Apple a Klein

Hirst inició su presentación con lo que probablemente era su argumento más fuerte: que Allen Klein había recibido pagos excesivos en sus comisiones por las regalías provenientes de varias fuentes. Su primero ejemplo fue el álbum "McCartney". Klein reclamó una comisión sobre las regalías del álbum aunque estaba claro que el no tenía un contrato de manejo con McCartney. Un punto de contención durante el litigio fue que si los álbumes solistas de los socios se consideraban como activos de la asociación, esto es, que si las regalías que generaban debían ser divididas (y en el caso de Starr, Harrison y Lennon, esto no importaba ya que Klein sí había firmado un contrato con ellos tres). McCartney fue inflexible en su postura, que exigía que los proyectos como solistas no fueran incluidos en el acuerdo de asociación.

En cierto momento, John Eastman escribió un comunicado a EMI Records en beneficio de Paul y pidió que la regalías del álbum "McCartney" fueran retenidas en lugar de ser otorgadas a Apple (y por consecuencia, a Klein). Una vez que Klein vio lo que el álbum había generado en el reporte de EMI, dedujo su comisión de aquellas ventas de los activos de Apple. Klein, por lo tanto, se otorgó a sí mismo 72 mil libras de comisión por regalías que ni siquiera habían sido entregadas a Apple sino que habían sido retenidas por EMI. Debido a lo anterior, McCartney no había recibido nada por las ventas del disco.

David Hirst entonces presentó su segundo ejemplo de sobrepago a Klein al analizar las comisiones cargadas por los discos de The Beatles que sí se encontraban cubiertos bajo el acuerdo de asociación y que fueron lanzados bajo el nombre "Beatles". Klein había negociado un incremento de las regalías con Capitol Records (que controlaba los mercados de los Estados Unidos, Canadá y México, el más grande para los discos de The Beatles) con el cual éstas aumentaron de 17 1/2% a 25% del precio de distribuidor. Aún el mismo McCartney aprobó esta renegociación y firmó los documentos que pusieron la nueva tarifa en vigencia. Sin embargo, el acuerdo que Klein había firmado con Starr, Harrison y Lennon incluía una comisión del 20 por ciento sobre cualquier incremento en las regalías que pudiera ser obtenidos por Klein. Cuando los registros finales fueron emitidos, se vio que Klein había tomado 20 por ciento de las regalías totales. Sobre la cantidad total de dinero que The Beatles ganaron durante 1969 y 1970, Klein exigió comisiones de manejo por 851 mil libras y ya se le habían pagado más de 600 mil libras. McCartney declaró que la comisión por tales regalías de Capitol Records no debió haber excedido de 250 mil libras.

(Con el fin de aclarar el efecto de lo que Klein hizo, imagine que The Beatles tuvieron ventas por sus discos de 100 mil. Con base en ese monto, The Beatles habrían recibido $17,500.00 bajo el contrato anterior, pero bajo el contrato renegociado con Klein, esa suma alcanzaría los $25 mil. Por el mismo, Klein tendría derecho a una comisión de $1,500.00, -20% de $7,500.00, las regalías adicionales obtenidas por la habilidad de negociar de Klein. Sin embargo, Klein tomó el 20% de la suma total, es decir, se quedó con una comisión de 5 mil).

Klein también había reclamado una comisión de 123 mil libras por las regalías de EMI que no incluían las ventas de los discos en los Estados Unidos, Canadá y México y de las cuales ya habían sido pagadas 114 mil libras a ABKCO. La posición de McCartney fue que no había existido incremento en esas regalías por las ventas de EMI y que, por lo tanto, no se le debía comisión alguna a Klein.

Varias Violaciones en el Acuerdo de Asociación

Hirst se refirió entonces a las numerosas violaciones que habían en el acuerdo de asociación. Tal como se describió previamente, el contrato original con Klein le fue presentado a Paul McCartney para su consideración y firma y bajo la ley básica de asociaciones, podría ser considerado como valido ya que fue validado por la mayoría de los socios. En corto, Paul pudo haber votado en contra de los otros o no votar y, como sucede en la vida, tuvo que regirse por la decisión de la mayoría. Sin embargo, después de la ejecución del contrato que McCartney se negó a firmar, existieron varios acuerdos adicionales entre Apple y Klein.

Para empezar, no existió disputa en cuanto a que, en septiembre de 1969, Apple Records, Inc., había enviado una carta a Capitol en la que solicitaba que las comisiones de Klein le fueran pagadas directamente a éste e indicando que ABKCO recibiría el 20 por ciento de todos los montos acumulados de Capitol Records, Inc. La carta fue firmada en representación de Apple Records, Inc. por Lennon a nombre de la asociación de Starkey y Lennon y de Apple Corp. Limited a nombre de Harrison y Lennon. McCartney mantuvo que él nunca vió esos documentos antes del litigio. El Acto de Asociaciones en Inglaterra, al momento, establecía que una mayoría de socios pueden gobernar ciertas casos pero solo después de efectuar una consulta con la totalidad de los mismos. La posición de McCartney fue la de asumir, sin conceder, que el contrato original con Klein había sido legal en ese momento y que cualquier variación en el mismo relacionada con Capitol Records tendría que ser evaluada con él con el fin de que fuera válida y qué no había sido el caso.

Un evento similar tuvo lugar en 1970, cuando fue enviada una carta a EMI en la cual Apple autorizó que el 10 por ciento de las sumas adeudadas a Apple le fueran pagadas a ABKCO, otorgándole a Klein una comisión por ventas afuera del mercado estadounidense que él no hubiera recibido bajo el acuerdo de mayo de 1969. Una vez más, esos documentos fueron firmados por Harrison, Lennon y Starkey, y como antes, McCartney declaró no tener conocimiento de tales documentos.

Los Registros Financieros de Apple

Hirst entró en detalles cuando habló del estado abismal de las cuentas de Apple. Señaló que, después de que Klein asumió el puesto de manager de The Beatles, no había existido nadie a cargo de la contabilidad entre agosto de 1960 y enero de 1970. Hubo una persona que no estuvo de manera continua entre enero y junio de 1970 y después ningún contador estuvo a cargo hasta el mes de diciembre del mismo año. No sólo fue un problema para McCartney determinar que dineros habían sido erróneamente pagados por Apple a Klein, pero también existía un problema creciente en cuanto a los impuestos. En una carta a Klein fechada en abril de 1970, uno de los contadores escribió que sus tres cartas anteriores relacionadas con las cuentas no habían sido contestadas y mencionó el interés sobre las ganancias obtenidas en la isla en las mencionadas cuentas. En correspondencia ante la corte, los contadores declararon que necesitaban una cooperación plena por parte de Klein y de Apple pero que no la estaban recibiendo.

El Estado Financiero de Apple

El abogado de McCartney se refirió entonces al estado financiero de la asociación. Sin ingresar en detalles legales, la información que pudo ser aportada por los contadores indicaba que el valor neto de Apple, excluyendo las propiedades de buena fe, era de 208 mil libras. No era una cantidad pequeña aunque también había un pago de impuestos pendiente por 341 mil libras. Además, existía una sobretasa de pasivos. Para empeorar las cosas, los Beatles, de manera individual, habían tomado dinero de la cuenta de la asociación dejando pagarés en su lugar. Lennon había tomado 76 mil libras, Starr 68 mil libras, Harrison 20 mil libras y McCartney 18 mil libras. Desde el punto de vista del estado de sus registros, no parecía que The Beatles pudieran cumplir con sus obligaciones fiscales.



Objeciones a la Capacidad de Klein como Manager

El Sr. Hirst entonces llegó al su punto final el cual señalaba los riesgos que corrían los activos de la asociación al estar estos manejado por alguien que no era de confianza como Klein. Además de los puntos que ya había mencionado en detalle (comisiones excesivas, variaciones secretar al acuerdo de manejo original y problemas en la contabilidad), Hirst continuó declarando cómo Klein se había involucrado en los asuntos de Maclen, una compañía de publicación propiedad de Lennon McCartney. Maclen funcionaba bajo contrato con Northern Songs y debía producir un cierto número de composiciones McCartney y/o Lennon cada año y, en 1969, Maclen inició una acción legal en contra de Northern Songs por cuestiones contables. Sin embargo, en el otoño de 1970, la acción legal cambió de ser por cuestiones contables a una de rechazo al contrato original. McCartney proclamó que este cambió se había efectuado sin su conocimiento y que Klein fue parte del mismo. Además, McCartney alegó que Klein había intentado apropiarse de una comisión por algunas de las ganancias de Maclen desde 1967 pero que los contadores le previnieron acerca de llevar a cabo tal acción.

Hirst entonces señaló que la práctica de tratar de cargar una comisión por las ganancias previas a la firma del contrato de Klein no sólo había sucedido con Maclen. Antes de que el contrato con Klein fuera firmado, en mayo de 1969, había existido una querella por disolución un tanto desagradable con Nems Enterprises. Debido a aquella batalla legal entre The Beatles y su compañía administradora, EMI retuvo un millón trescientos mil libras hasta que ésta se resolviera. La situación se resolvió en julio de 1969 y EMI liberó el dinero que había retenido. Klein entonces cobró su comisión del dinero que EMI había pagado en julio de 1969 aunque era claro que el dinero era originalmente pagadero en marzo 1 de 1969, dos meses antes de que se firmara el acuerdo con Klein.

McCartney también presentó varias quejas relacionadas con el manejo de la película "Let It Be". Mantuvo que el contrato que él había firmado en 1965 con The Beatles Film Production Limited (que después fue Apple Films Limited) había expirado y que, por lo tanto, Klein no tenía autoridad alguna para llevar a cabo negociaciones con United Artists para la difusión de una película en la cual él apareció. Además, se exhibió una carta de Ringo Starr a nombre de Apple Films, Inc. (la distribuidora estadounidense) y por George Harrison a nombre de Apple Films Limited, fechada el 10 de abril de 1970, en donde Apple consentía en darle a ABKCO el 20 por ciento del dinero pagado a Apple Films, Inc. Lo significativo de este hecho fue que Klein recibiría su dinero en dólares en lugar de libras y no tendría que pagar impuestos en Inglaterra. Sin embargo, el ingreso de The Beatles generado en Estados Unidos sería pagado a través de su compañía inglesa. La posición de McCartney fue la de señalar que Klein primero había hecho negociaciones para la aparición de la película "Let It Be" sin el derecho respectivo y después de que éste hizo el trato de tal manera que no tuviera que pagar impuestos en Inglaterra por la comisión obtenida por las ganancias de la película.

Para concluir la parte que mostraba de la poca confiabilidad de Allen Klein, Hirst señaló que éste tenía problemas legales en Nueva York, incluyendo una condena criminal y problemas legales con la Comisión de Seguridad e Intercambio por malos manejos comerciales. La posición de Hirst era clara: Klein no era una persona a la cual se le podía confiar una corporación como la de los Beatles. Con el fin de apoyar sus puntos, se cuestionó la integridad de Klein usando la Declaración Jurada que éste entregó a la corte inglesa. (ver Declaración Jurada de Klein).

La Certeza de la Disolución

McCartney entonces se adentró a la parte corta de su argumento, la cual señalaba que la asociación sería disuelta en una fecha futura. Muchos de los factores que habían sido enlistados previamente acerca de la relación comercial de las partes y el riesgo de sus activos también se aplicaron a tal cuestión. Sin embargo, existieron un par de factores únicos relacionados con este punto.

McCartney claramente no aceptó con agrado el hecho de que Klein había sido impuesto como manager por los otros tres. Aún así, el hecho primario fue la forma en que los eventos sucedieron después de que Klein fue nombrado manager lo que McCartney citó como evidencia que probaba que la asociación no podía continuar. Sin importar los malos manejos efectuados por Klein, fueron los demandados, Starr, Lennon y Harrison, los que nombraron a ABKCO como manager. Fue el hecho de que los tres socios individuales se involucraran en tratos con Klein lo que afectó los activos de la sociedad sin el conocimiento de McCartney. Se presentó como evidencia que McCartney no sólo no quería tener tratos con Klein sino que no deseaba ser parte de transacciones llevadas por aquellos que no lo tomaron en cuenta.

Hirst entonces se acercó a la parte final de sus argumentos: que la relación artística entre las partes se había roto y que no parecía que pudiese enmendarse. Citó el esfuerzo para retrasar el lanzamiento del álbum "McCartney" y los cambios en la canción de Paul "The Long and Winding Road" en Let It Be. Hirst también señaló que la libertad artística de McCartney estaba siendo coartada por sus socios. Esto, junto con el punto anterior, se calificó como "tratos injustos" entre los socios y la aceptación de tal situación sería suficiente para que la corte disolviera la asociación.

Observaciones del Autor

Como se mencionó en la introducción, la moción de McCartney solicitando a un receptor fue concedida. El juez no tuvo que emitir veredictos para todos los puntos presentados por McCartney y centró su decisión, que fue de naturaleza temporal, en los malos manejos de Klein. El juez encontró veracidad en el argumento que establecía los riesgos sobre los activos de la asociación si ésta continuaba operando de la misma manera y además dio por cierta la probable disolución de ésta debido a la conducta de los demandados.

En retrospectiva, la decisión de McCartney desde un punto de vista puramente comercial fue extremadamente fácil de tomar. Aunque algunas de las acciones de Klein como manager habían sido aprobadas por McCartney, sobre todas aquellas que se dieron durante las primeras etapas de la relación (el arreglo con Nems y las negociaciones con Capitol), las cosas pasaron de ser medianamente tolerables a totalmente insufribles en poco más de un año. Sin embargo, ser el que demandó a los demás con el objetivo de deshacerse de una situación intolerable debió haber sido una decisión extremadamente difícil. Paul tuvo que aguantar los reproches de sus compañeros, las críticas de la prensa y la desaprobación del público que lo vio como el que tomó la iniciativa para acabar con The Beatles. Aquellas personas externas que lo criticaron no sabían o no entendían totalmente lo que él sentía que estaba mal; aquellos que vivieron la situación de cerca lo menospreciaron aún cuando fueron los que tomaron las decisiones sin su aprobación. Aquí la pregunta no es por qué McCartney demandó sino por qué se tardó tanto tiempo en hacerlo.

Los 60's: La Década de los Beatles. Parte 1.

En esta serie de documentales de la History Channel se ofrece el contexto social, político y cultural de los sesenta el cual busca explicar de forma causal el surgimiento de los Beatles, mostrándonos de qué forma el grupo es resultado y causa al mismo tiempo, de muchos de los acontecimientos relevantes de la década.


Parte 1: Rebeldes Adolescentes (1960-1961)




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Historia: Espiando a los Beatles



Los National Archives, alojados en Kew Gardens, a cuarenta minutos del centro de Londres, son una de las joyas de la Corona británica. Literalmente: sus contenidos tienen crown copyright. Pero también están abiertos a sabuesos curiosos como el italiano Mario J. Cereghino, coautor de libros de investigación como el reciente Che Guevara: top secret. Se le ocurrió indagar lo que allí había sobre los Beatles y ha encontrado un pequeño tesoro.

Para las autoridades británicas de la década de los sesenta, los Beatles fueron mucho más que un fenómeno sociocultural: supusieron un alivio para la balanza de pagos. Abrieron un insospechado apartado exportador, que abarcaba desde la música pop hasta la moda y el turismo relacionados con el swinging London.

Los vientos políticos soplaban a su favor y traían aromas proletarios: el Gobierno conservador, humillado por el escándalo Profumo, fue reemplazado en 1964 por un Gabinete laborista, con Harold Wilson -miembro del Parlamento por Liverpool- como primer ministro. Treinta años antes de que Tony Blair se arrimara al brit pop, el astuto Wilson se subió rápidamente al carro de los Beatles. Buscó oportunidades para fotografiarse a su lado y se encargó de que, en 1965, Isabel II les nombrara MBE (miembros de la Orden del Imperio Británico). Tal honor se administraba con tacañería: no se extendió a su manager, Brian Epstein, posiblemente a causa de su reconocida homosexualidad. Aun así, la distinción causó una polémica muy british: varios veteranos de la II Guerra Mundial devolvieron sus medallas al palacio de Buckingham, alegando que se sentían insultados al encontrarse en compañía de unos “melenudos chillones”.

Los Beatles también proporcionaron quebraderos de cabeza a los burócratas del Foreign Office. A principios de 1964, un parlamentario preguntó por un feo incidente que tuvo por escenario la Embajada británica en Estados Unidos. Tras un concierto en el Washington Coliseum, los músicos recibieron una invitación para conocer la embajada, donde se celebraba aquella noche un baile de caridad. La noticia se difundió y muchos fans se apuntaron al evento. Cuando los Beatles aparecieron en el salón de baile, fueron avasallados por docenas de personas. Alguien sacó unas tijeras y cortó un mechón de la melena de Ringo Starr, que luego confesó sentirse aterrado ante un acoso tan inesperado.

Según el Daily Express, la hija de un diplomático era quien manejaba la tijera. Los responsables de Asuntos Exteriores removieron el cielo con la tierra hasta lograr determinar que la culpable era una estadounidense de 18 años; localizaron igualmente una carta del representante, Brian Epstein, en la que agradecía al embajador David Ormsby-Gore la hospitalidad demostrada durante su visita a la capital de EE UU.

Convertidos en respetables miembros de la Orden del Imperio Británico, las giras de los Beatles generaron informes reservados sobre sus andanzas por otros países. El correspondiente a la visita a Japón en 1966 tiene siete folios extremadamente detallados, donde se hacen cálculos sobre los costes del despliegue policial (30.000 libras) y se reconoce que despertaron oposición tanto en los periódicos comunistas como en sectores nacionalistas; estos últimos lamentaron que actuaran en el Budokan, un recinto reservado hasta entonces a las artes marciales japonesas. El autor del informe, el encargado de negocios de la embajada, consideraba que fue un gran éxito comercial y sugería que la industria textil británica aprovechara la pasión por la estética mod y la moda Carnaby Street. Sólo se criticaba a los Beatles por la brevedad de sus conciertos: “Tocaron media hora mientras [el pianista Arthur] Rubinstein, que por las mismas fechas se presentaba en Tokio, ofreció un recital completo”. Pero, se aseguraba, los miembros del cuarteto defendieron gallardamente el pabellón imperial: se mostraron “simpáticos, ingeniosos y dotados de talento”.

Un dossier del Tesoro británico también revela que podían ser unos ingenuos. En el verano de 1967, sus abogados solicitaron 120.000 libras esterlinas en divisas para la compra de Aegos, una isla griega de 320.000 metros cuadrados, más unos islotes cercanos. Esa cantidad incluía la renovación de cinco casas de pescadores, donde se supone que vivirían idílicamente los Beatles y sus acompañantes, junto a la playa y los olivares.

La petición desató gran debate en el departamento. Se reconocía la aportación de los Beatles a la economía británica (estimada en unos 27 millones de libras) y su necesidad de tranquilidad para crear, pero el principal problema residía en que en el Banco de Inglaterra sólo quedaban 30.000 libras del fondo destinado a la compra de propiedades en el extranjero. Eran tiempos de control extremo sobre el movimiento de capitales.

Lo extraordinario es que nadie se planteó las dimensiones políticas del hecho de que los Beatles se instalaran, aunque fuera para temporadas breves, en Grecia. Pocos meses antes, un cónclave de coroneles había dado un golpe militar e instalado una dictadura particularmente idiota y cruel. En el círculo de los Beatles se había colado Alexis Mardas, un ingeniero electrónico que era hijo precisamente de un oficial de inteligencia comprometido con la junta golpista.

Todavía faltaba más de un año para que los Beatles (o John Lennon, para ser más exactos) se politizaran. Además, el régimen de los coroneles no resultaba particularmente aberrante para el Gobierno británico, que -desde la II Guerra Mundial- armó y alentó a los sectores anticomunistas de la sociedad griega, tolerando incluso las actividades de escuadrones de la muerte en Chipre.

El citado Mardas había fascinado a los músicos con varios artilugios de su creación y se ganó el apodo de Magic Alex. Fue nombrado responsable (y accionista) de Apple Electronics, una división de la empresa grupal, que debía comercializar sus inventos. Pero Magic Alex fue incapaz de sacar adelante sus ocurrencias y se estrelló cuando prometió a los Beatles un recinto para grabar con 78 pistas (en Abbey Road se trabajaba entonces con mesas de cuatro pistas); no logró un estudio funcional.

El proyecto de refugiarse en Grecia naufragó en el otoño de 1967. Tenía demasiado de fantasía a lo Guillermo Brown -¡cuatro músicos trabajando aislados, al sol del Egeo!- y finalmente se desechó cuando surgieron gastos extras y complicaciones legales por la parte griega. El último certificado del Banco de Inglaterra ratifica que no se usaron las divisas (56.000 dólares) destinadas a la adquisición de la isla.

Un inciso: Alexis Mardas protagonizó algunas otras aventuras infames en la biografía de los Beatles, como intentar seducir a Cynthia Lennon para allanar el camino al divorcio de John. En los setenta, tras renunciar a su puesto en Apple, Alexis se reinventó como experto en seguridad. Desarrolló un blindaje para coches supuestamente infalible y se alió con Constantino, el depuesto rey de Grecia, para vender sus sistemas de protección a diferentes monarquías (aparentemente, el príncipe Juan Carlos de España, envió un automóvil a Inglaterra para que fuera blindado, lo que no pudo hacerse). El negocio se frustró cuando el sultán de Omán y el rey Hussein de Jordania comprobaron que, sometidos a fuego graneado, los vehículos “mágicos” podían explosionar.

Algunos de los documentos recuperados por Mario J. Cereghino incluyen recortes de prensa: funcionaba un servicio que escudriñaba los periódicos en busca de noticias de posible interés para los diferentes departamentos gubernamentales. Conviene saber que, en 1968, los Beatles dejaron de poseer su implícita inmunidad. Coincidió con la radicalización de Lennon, conmocionado por el Mayo francés y otras revueltas políticas. El 18 de octubre, la policía encontró marihuana en su piso y, en compañía de Yoko Ono, fue detenido. Lennon consumía drogas, pero aseguraba que, en aquella ocasión, todo fue un montaje; el responsable, el muy temido detective Pilcher, terminaría más tarde en la cárcel. El asunto se cerró con una multa de 150 libras, pero crearía peliagudos problemas a Lennon en los setenta, cuando la Administración de Nixon quiso expulsarle de Estados Unidos.

Era un aviso. Uno de los documentos recuperados por Cereghino es obra de la Policía Metropolitana, que respondía a la denuncia de George William Colmes, un contable de 64 años que declaraba ser aficionado a visitar exposiciones de pintura y escultura. El 17 de enero de 1970, de camino a su oficina, pasó delante de la London Arts Gallery, en el número 22 de New Bond Street. Se anunciaba Bag one, una muestra de litografías de John Lennon. Lo que vio allí le escandalizó y corrió a contárselo a un sargento de la comisaría más cercana:

“Los primeros dibujos parecían infantiles. Pero los otros me horrorizaron. Eran caricaturas exageradas y distorsionadas que reproducían relaciones sexuales de naturaleza repulsiva y desagradable. Sinceramente, me indignó y me enfermó que una mujer fuese retratada en semejantes posturas. Me sentí contaminado por el mero hecho de ver esos dibujos. El pensar que un hombre pudiera usar así a su esposa, ni siquiera se trataba de una modelo desconocida, convierte la institución del matrimonio en una farsa. Si pienso que mi madre, mi mujer o mi cuñada podrían ser reducidas a algo semejante por Lennon o los que organizaron la exposición, me pregunto adónde ha ido a parar la decencia”.

Aparentemente, no fue el único visitante indignado (según una interpelación parlamentaria, podrían estar teledirigidos para facilitar la intervención policial). Al día siguiente, una delegación de Scotland Yard visitó la exposición con intenciones poco amistosas: se decretó su clausura y se confiscaron ocho litografías de contenido sexual. En la denuncia por obscenidad a los propietarios de la galería se especifica que “las litografías ilustran la relación de Lennon con Yoko Ono, su matrimonio y su consecuente actividad sexual. Se observan los siguientes actos: 1. Yoko Ono hace una felación a John; al dorso está la leyenda: ‘El instrumento de John en la boca de Yoko’. 2. John le hace un cunnilingus a Yoko. 3. John tiene relaciones sexuales con Yoko; al dorso leemos: ‘John posee a Yoko por detrás’. 4. Alguien ejecuta un cunnilingus a Yoko mientras otra figura le besa el seno. 5. Las otras cuatro ilustran a Yoko en poses desmañadas que enfatizan su vagina”.

La fiscalía insistió en que el nombre de Lennon atraía a un público joven a la galería y que el artista buscaba un beneficio económico como un vulgar pornógrafo: cada litografía se vendía a cuarenta libras. De paso, también mencionaba su condena de 1968 por posesión de cannabis. Sin embargo, el juez tenía muy presente el follón provocado por el proceso a El amante de lady Chatterley y el caso fue rechazado.

Lo que todavía no ha salido a la luz pública es el seguimiento de John Lennon por el servicio secreto británico, el MI5. Nunca se ha confesado oficialmente tal vigilancia, pero el FBI estadounidense ha reconocido poseer copias de esos informes, que se niega a revelar por proceder de “un Gobierno extranjero”. Un espía inglés arrepentido, David Shayler, tuvo oportunidad de hojear los legajos de Lennon y ha contado que allí se detallaba que había financiado diversas causas izquierdistas, incluyendo el Workers’ Revolutionary Party, grupo trotskista que contaba con Vanessa Redgrave en sus filas. También pagó multas a manifestantes que protestaban contra el apartheid surafricano y subvencionó a Michael X, un autoproclamado líder del black power que terminaría ahorcado en Trinidad, por el asesinato de una mujer blanca. Lo que despertó la mayor hostilidad fue su identificación con los católicos de Irlanda del Norte; se ha sabido que Lennon estuvo dispuesto a dar un concierto a favor de las familias de prisioneros del IRA.

El último documento hallado en los National Archives es el más frío, pero, con sus ristras de cifras, transmite una cierta melancolía. Llegó al Tribunal Supremo y se sumó a la demanda de Paul McCartney contra sus tres compañeros, materializada el último día de 1970. Con fecha 20 de abril de 1972, la empresa de auditoría Arthur Young McClelland Moores presentaba las cuentas de The Beatles and Co. correspondientes a los años 1970 y 1971. Parafraseando a Lennon, era la confirmación de que “el sueño había acabado”.

miércoles, 15 de abril de 2009

Historia: Ringo renunció a los Beatles en 1968


En 1968 las tensiones, que ya se habían manifestado en algunos miembros del grupo, se hicieron manifiestas cuando los Beatles se enteraron de la situación financiera de Apple Corps. Ante tal situación decidieron cerrar la boutique de Baker Street debido a las pérdidas que generaba. Al mismo tiempo George Martin, se encontraba realizando otros proyectos y cada vez se aparecía menos en las sesiones de grabación, dejando a cargo a de las mismas a sus ingenieros de sonido. Ante tal circunstancia el grupo había empezado a producir sus propias composiciones erigiéndose el compositor de cada canción como el guía de las sesiones de grabación. Esta situación generó conflictos que se habían mantenidos latentes ante la mediación de George Martin, pero que ahora se manifestaban en todo su esplendor; es en este momento cuando salen a relucir las diferencias y lus puntos de vista de los miembros del grupo. Los detalles sobran, pero los más significativos son los que llevan hacia una vía que conduciría, a largo plazo, a la disolución del grupo, y, en el plazo inmediato a la renuncia de Ringo. Tenía que ser Ringo precisamente, porque al ser el último invitado al barco Beatle, tenía la obligación de ser la parte más sensata en la lucha de egos que se desató a partir de ese momento.

Así por ejemplo, durante la última sesión para la grabación de Hey Jude, el 1 de agosto de 1968, se produjo uno de los primeros momentos de tensión al rechazar Paul una idea de George para un arreglo de guitarra, tan intensa fue la reacción de ambos que George permaneció el resto de la sesión en la sala de control sin intevenir activamente en la grabación. Sin embargo, no correspondía a Ringo ser el primero en estallar ante la situación. George había estado batallando varios días en encontrar el sonido ideal para la canción Not Guilty (7, 8, 9 y 12 de agosto), pero en esa atmósfera en donde los integrantes del grupo no toleraban la interferencia de otro de los miembros en la grabación de sus canciones y dejaban de ayudarse unos con otros, dejando la responsabilidad de la finalización de los temas en manos de la gente del estudio, Harrison asumió la responsabilidad de terminar por sí mismo el tema, pero abrumado por no encontrar la versión definitiva a su canción se marchó a Grecia sin decir nada, obligando a los demás a cancelar una sesión de grabación. Antes de su partida Harrison intervino todavía en Yer Blues (13 y 14 de agosto), pero esta vez fue Paul el que se hartó de los procedimientos y de las interminables tomas de la canción para terminar absteniéndose de participar en las seiones de What's de New Mary Jane (14 de agosto).

El día 20 de ese mismo mes, todavía sin George; Lennon y Starr, que estaban trabajando previamente en el estudio 3 de Abbey Road en Yer Blues, vistaron a McCartney quien estaba terminando Mother Nature's Son en el estudio 1. A decir de las personas que se encontraban en el lugar, la atmósfera se congeló de inmediato. Dos días más tarde, durante la primera sesión de Back in the USSR (22 de agosto), Starr se levantó y se fué, declarando que dejaba el grupo.

La decisión de Ringo no fue inmotivada: él fue invitado a los Beatles en el momento en que reinaban en el grupo la armonía y la buena onda; Ringo debía ser, entonces, el primero en marcharse cuando esa armonía terminase, su actitud fue el primer síntoma claro de que los Beatles se encaminaban a su fin. La actitud de McCartney, por otra parte, que a primera vista parece inmotivada, tiene una razón de ser. Resulta que para la grabación de Revolution 9 (6,10,11 y 20 de junio), McCartney se encontraba en Nueva York, siendo grabada esta canción en su mayoría por Lennon, Yoko Ono y con una pequeña contribución de Harrison. La reacción de McCartney fue de desagrado, no se sabe si por el resultado final del experimento sonoro o por no haber intervenido en el mismo. Lo cierto es que esta situación condujo a Paul a tomarse una pequeña venganza personal ante la afrenta de Lennon, grabando Why Don't We Do It In The Road, el 9 y el 10 de junio con Ringo en el estudio 1, mientras George y John supervisaban unas mezclas en el estudio 2. Si bien es cierto que a pesar de tener años de no componer realmente juntos alguna canción, hasta ese momento ninguno de los Beatles había grabado una canción sin la presencia de alguno de los otros, a partir de Revolution 9, y posiblemente sin que Lennon se diera cuenta tan absorto que estaba en su idilio amoroso, todos asumieron que las canciones eran responsabilidad de su autor. Durante la primera sesión de Back in the USSR, el 22 de agosto, Starr se levantó y se fué, declarando que dejaba el grupo, tras una discusión con Paul sobre un arreglo de la batería. Todavía después el grupo grabó Dear Prudence sin él (28 a 30 de agosto), Ringo se rentegró al trabajo cuando encontró su batería llena de flores, empezando a trabajar con ellos a partir del 5 de septiembre. En estas cortas vacaciones, Ringo se llevó a la familia a la isla de Cerdeña, en donde en una charla con un pescador, se quedó fascinado al enterarse que los pulpos recorren el fondo del mar recogiendo piedras y objetos brillantes con los que construyen jardines. Con esa idea Ringo regresó a Abbey Road con la canción Octopus's Garden, seguramente ninguno de ellos se atrevió a rechazar la composición de Ringo, por muy floja que esta fuera, todos le debían un lugar a su canción como el miembro de la banda que era.

domingo, 12 de abril de 2009

The Beatles Live at Budokan (The Beatles, 1966)

El año 1966 significó un alo difícil para los Beatles, la desafortunada declaración de Lennon sobre la popularidad de los Beatles y la posterior quema de discos en el cinturón bíblico de E. U., el incidente en las Filipinas, y las protestas por su presentación en el Budokan en Japón. Este concierto se llevó a cabo el 30 de junio de aquél año y representa un momento histórico en la historia de los Beatles, inclusive en el concierto todos excepto Paul se muestran desganados y sólo continuan el show porque son unos profesionales, ya casi no hay risas ni diversión en el escenario. Las canciones del show son:

01 Rock And Roll Music
02 She's A Woman
03 If I Needed Someone
04 Day Tripper
05 Baby's In Black
06 I Feel Fine
07 Yesterday
08 I Wanna Be Your Man
09 Nowhere Man
10 Paperback Writer
11 I'm Down

sábado, 11 de abril de 2009

Los Estados Unidos contra John Lennon (Español)

Ahora presentamos este excelente documental en el idioma de Cervantes.¡Disfrútalo! Para mayores referencias dirígete al post del 6 de abril de 2009 donde encontrarás más información.



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Desclasificado: John Lennon

Documental de la History Channel de la serie "Desclasificados" que presenta el material desclasificado de la FBI sobre el seguimiento y el archivo sobre John Lennon. El documental nos muestra los orígenes de este seguimiento, como son el acercamiento de John con los movimientos radicales de los 70, su intervención en manifestaciones, conciertos y otros actos políticos de entonces, el acoso de la agencia para que Lennon se retirara de los E.U., el juicio que entabló contra el gobierno norteamericano para que no fuera deportado, y el triunfo final que significó su permanencia en aquél país. Documental imprescindible para quien intente conocer un poco más de la historia de los Beatles teniendo como protagonista al más polémico de ellos: John Lennon. Esperamos todavía a que se desclasifiquen los documentos restantes que todavía no loo han sido, esperando que ellos desvelen los orígines y causas de su asesinato.



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viernes, 10 de abril de 2009

The Beatles At Royal Variety Performance (The Beatles, 1963)

La presentación de la Royal variety es un evento de gala realizado anualmente desde 1912 en el Reino Unidos, el cual es organizado por la familia Real Británica; en este evento se realizan una serie de presentaciones como comedia, canto, magia y otros actos, el evento es, en suma un show de variedad, en estricto sentido. En el show que les presentamos aquí, se realizó el 4 de noviembre de 1963, cuando los Beatles se encontraban en la cima del éxito en Inglaterra, y es cuando John Lennon acuñó la frase que se hizo famosa en el mundo entero: "Para nuestro último número necesito su ayuda. ¿Podría aplaudir la gente de los asientos baratos? El resto, sólo agiten sus joyas." Frase inocente, comparada con algunas que años después el mismo Lennon lanzaría, pero que en perspeciva significa el ensayo de lo que vendría después para un Lennon provocativo y contestatario.



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jueves, 9 de abril de 2009

El Lado Desconocido de Los Beatles

El documental del canal de Tv History Channel habla sobre la historia de los Beatles que todos conocemos, pero además nos muestra imágenes inéditas que es difícil encontrar en otra parte como por ejemplo imágenes de su último concierto en Candlestick Park. Analizan también, los motivos del éxito de la banda, su desparpajo, su originalidad, su carisma, pero sobre todo su accesibilidad: en ese entonces los Beatles no asumían la pose de estrellas, sino que se mostraban humildes, como dice George, leían en los periódicos las noticias y parecía que estaban leyendo lo que se escribía sobre otros. Otras escenas nos muestran a los Beatles en una gira por Australia, payaseando y contestando las sosa preguntas con ingeniosas respuestas. Pero también nos muestra situaciones peligrosas en donde las cosas se salían de control, como en el caso del Empire Stadium en Vancouver, durante su primera gira, en donde una multitud asaltó en escenario y se hizo el caos. También nos presenta la forma en que la intimidad del grupo cada vez se reducía más, así como los problemas derivados de esta situación, la violencia y el strees acumulado, así como la frustración. Nos presenta también las giras por Japón y el incidente en el Budokan, la experiencia porlas Filipinas, y el tema del cristianismo en la norteamérica conservadora. Documento esencial para comprender el fenómeno social y cultural provocado por los Beatles, presentado íntegramente en español.

Nota: El documental presentado a través de Megaupload, al tratarse de una cinta de 48 minutos, puede verse sin problemas en su totalidad, recuérdese que el límite de las vistas para ese sistema es de 70 minutos.